Funcionario digital, ¿Nueva profesión 2.0?

Andaba yo en lo que me parecía un simple proceso con la "Administración electrónica", dispuesta a dar algunos clics rápidos y pasar 3 pantallas para tener resuelta una transferencia de dominio. Así, cuando me llegó el mail de aviso, pulsé en el fantástico enlace facilitado y me dispuse a realizar el proceso. Confiada en la simplicidad de lo que iba a hacer, clic, a clic por el portal red.es llegué al punto, o mejor dicho puntazo, en el que debía adjuntar el DNI/NIE de la persona que iba a aceptar el dominio (italiana por cierto) y en ese preciso instante, todo se complicó mucho, mucho. Quiero pensar, que el sistema al que me enfrentaba era el resultado de un concienzudo trabajo tecnológico y que quizás, el funcionario responsable del trámite no le facilitó al informático de turno, la información necesaria, pues, para un simple trámite he necesitado 5 largos intentos, a saber: 

• La 1a vez el documento que hacía las veces de NIE no fue válido
• La 2a tras adjuntar el pasaporte me solicitaron el documento del NIE
• La 3a pidieron NIE y pasaporte en un mismo archivo jpg
• La 4a el archivo jpg no tenía la resolución necesaria
• La 5a empezó regular pero lo conseguí, transferencia finalizada, eureka!!!

Torrat, torrat el funcionario!

En ninguno de los casos anteriores había un "más información", un "características de los archivos a enviar", un "contacto". Es una página poco atractiva y nada amigable, pero lo peor es la poca o ninguna información adicional que te dan (ah, me olvidaba, cuando ya has enviado la imagen, no está todo hecho, la página puede decirte que estás superando los 600 píxeles de ancho que nadie te ha dicho pero que seguramente configuró el amigo informático "para sus cosas"). Ciertamente, nunca, nunca, había repetido 5 veces el mismo trámite (pero no os desaniméis, pueden ser más) ya que, además, en cada ocasión fallida todo el proceso debe iniciarse de nuevo. No es por decir, ni criticar, ni nada parecido, pero mientras iba subiendo archivos, cruzando los dedos y esperando el mail de confirmación, me venía a la mente, la imagen del funcionario digital al otro lado de la pantalla. Sí, el funcionario que espera mis errores para, sin apenas información, enviarme con cara de satisfacción el odioso mail de: proceso rechazado!!!

No sé si mi amiga Cristina Aced, en su libro "Nuevos perfiles profesionales 2.0" tenía previsto a este individu@ que, agazapado tras las teclas, sin escrúpulos, sin mirarte a los ojos, sin enviarte un mensaje de ayuda, parece disfrutar pulsando el botón enviar para hacerte llegar ese mensaje que tanto odias y que aún refuerza más, tu ya nefasta, experiencia de usuario.