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Agosto 2018 |
Conocimos a
Dori Keita un ya lejano mes de
agosto de 2018 subiendo con un calor y una humedad infernal a Iwol, la capital bedik en País Bassari, allá al sur de Senegal. No habíamos casi puesto nuestros cansados pies y nuestro sudado cuerpo a la entrada de Iwol que apareció una mujer menuda acompañada de dos niños cargada de collares, pulseras y otros abalorios. Nos llamó la atención el septo que lucía en su nariz y como nos iba enseñando los productos que vendía, sobre todo los pelos de puerco espín que eran la base del septo nasal.
Y ese encuentro marcó mi primera arpillera africana titulada "Yo tengo un pesebre africano", siendo además mi primera arpillera en solitario. Cosí la arpillera con emoción, recordando cada momento de nuestro primer viaje a Senegal.
En abril de 2019, en plena época seca, volví a Iwol con la intención de enseñar a Dori que había quedado para siempre en la arpillera que iba a estar a partir de aquel momento en el Chiringuito de mi amigo Arouna en Ibel. No sé si ella lo entendió, pero miraba y miraba la arpillera con cara sorprendida.
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Dori mirando atentamente la arpillera en abril 2019 |
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Foto finish con la arpillera en Iwol en abril 2019 |
Hoy, conozco por Oumou, mi amiga de Senegal a tus pies que Dori se ha ido, que ha fallecido y ya no estará más a la entrada de Iwol. Ha emprendido viaje dejando atrás su querido Iwol, ese lugar mágico y especial, arriba de una de las montañas de País Bassari,
Hacía tiempo que no escribía pero hoy, al ver la publicación de Oumou he querido guardar este recuerdo en Miraquebé, mi blog que con los años a la espalda, se ha convertido en mi baúl de los recuerdos.
Ba benen yoon Dori, que la tierra te sea ligera!!!!
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Os dejo aquí la arpillera de la que reproduzco el texto guardado celosamente en su bolsillo trasero:
YO TENGO UN PESEBRE AFRICANO
Hacía mucho calor, mucha humedad y la montaña seguía alzándose ante nosotros queriendo tocar el cielo. Abdoul subía a paso ligero con sus chanclas y nosotros le seguíamos pidiendo aire. "He acabado el bachillerato y voy a ir a la universidad" nos decía. Y al fin, llegamos a la cima, ante nosotros una gran manta de terciopelo verde salpicada por alegres cabañas me dejó sin palabras, allí estaba mi pesebre africano!!! En aquel momento una extraña sensación se apoderó de mí, era una mezcla de paz, emoción y alegría que me tenía los pies clavados al suelo. Salieron a nuestro encuentro una simpática anciana y dos niños, los tres lucían una enorme sonrisa en su cara y nos ofrecían collares, pulseras y otros abalorios. Iwol, un poblado bedik al sur de Senegal con gentes amables que sonríen mirándote a los ojos y que, a pesar de la enorme distancia que nos separa en muchos sentidos, me hicieron sentir muy cerca.
Sí, esta arpillera me la pedía a gritos el corazón, esta arpillera es la primera que he hecho completamente en solitario y es mi pequeño tributo a País Bassari. Este lugar increíble al que he decidido volver para sentir de nuevo, con toda la fuerza que desprende, que mi corazón late y late con las personas que me encuentro cuando camino por el mundo con los brazos abiertos.
Viva el país de la teranga, gracias por hacerme sentir tan y tan viva!!!
Ubicación: Chiringuito de Arouna, Ibel, Senegal
Que en paz descanse
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